PROFESIÓN / MUSAAT Las juntas entre los propios colectores son otro de los puntos conflictivos, pues su mal encaje o la falta de estanqueidad del encuentro hacen que existan pérdi- das del fluido transportado. Si en el diseño de las pie- zas, el fabricante no ha previsto la inclusión de un ani- llo estanco, o la propia tubería llega a ser algo porosa (como ciertas tuberías de hormigón centrifugado), los problemas se verán multiplicados. Finalmente, una deficiente previsión de las pendien- tes necesarias hace que existan problemas de ralentiza- ción, decantación del material en suspensión e, incluso, retorno del fluido por contrapendiente. RECOMENDACIONES TÉCNICO-CONSTRUCTIVAS Antes de indicar aspectos de diseño o de puesta en obra, a continuación, se incluirán los materiales más habituales que existen en el mercado, así como sus va- riantes y dimensiones. MATERIALES • Colectores Son las tuberías por las que discurre el agua de evacua- ción, ya sean de tipo pluvial o residual. En el interior de viviendas de España, el material más habitual que se coloca es de PVC 1 . (Ver tabla 1) • Arquetas Son los recipientes o ‘cajas’ hexaédricas o prismáticas (prefabricadas o no) que se disponen en la unión del sa- neamiento vertical y el horizontal, en zonas de control 1 Nomenclatura de las series de PVC: según la norma UNE-EN 1399- 1:1999 referidas a tubos de PVC para evacuación de aguas residuales, los códigos a utilizar según el uso son: “B” (destinados solo a su utiliza- ción en el interior de los edificios) y “BD” (para el ámbito anterior y a los enterrados en el suelo en el interior de la estructura del edificio). Por su parte, en la norma UNE-EN 1401-1:1998 se indica que los tubos para el saneamiento enterrado sin presión se marcarán con “U” (para utilizar- los en el exterior de la estructura del edificio) o con “UD” (para utilizar- los tanto en el interior como en el exterior de la estructura del edificio).