Cáceres, a vista de pájaro club+renfe para CÁCERES Conjuntos monumenta-les y cernícalo primilla Extremadura es pionera en Europa en conservación de zonas urbanas con presencia de especies de aves protegidas, principalmente colonias de cernícalo primilla, un pequeño halcón migratorio que suele verse en lo alto de edificios y antiguas construcciones. Existen nueve zonas ZEPA urbanas (Zonas de Especial Protección para las Aves) especialmente identificadas: Cáceres, Plasencia, Trujillo, Jaraíz de la Vera, Brozas, Garrovillas, Saucedilla, Belvis de Monroy y la Casa de la Enjarada ofrecen la posibilidad de completar la visita a espacios monumentales, con la contemplación de una amplia presencia de avifauna y su convivencia con el entorno. La zona de Canchos de Ramiro, cuyas crestas cuarcíticas son refugio del buitre leonado, la águila real, cigüeña negra o el halcón peregrino. El águila imperial ibérica, la cigüeña negra, el buitre negro, el águila perdicera, el alimoche… Hasta 385 especies diferentes de aves cohabitan en Extremadura, una cifra que convierte a este territorio en una de las regiones europeas con mayor importancia para aficionados y expertos ornitología. Dentro de esta comunidad, la provincia de Cáceres, además, por sus grandes espacios naturales, es el lugar idóneo para observarlas de manera tranquila. Las dehesas cacereñas, uno de los paisajes más representativos de la región, desempeña un papel crucial en la elevada diversidad que alcanzan las aves. En ellas se cita una gran variedad de hábitats que configuran un complejo mosaico de fauna y flora, como se puede disfrutar en rutas como la que discurre entre Cáceres, Santa Marta de Magasca y Trujillo y que recorre los Llanos de Cáceres y Trujillo, zona ZEPA donde disfrutar de ver la más voluminosa de las especies de la avifauna ibérica y una de las aves voladoras más pesadas que se conocen, la avutarda. Este recorrido, entre pastizales naturales, cultivos de cereal de secano y encinares, manifiesta un contraste paisajístico de enorme belleza, pasando de la vegetación característica de los terrenos llanos de cultivo de cereal a la frondosidad de los cauces fluviales. Esto origina el que abunden poblaciones de calandria, cogujada montesina, triguero y gorrión moruno, así como otras especies como el mochuelo común, el críalo, la abubilla, la tarabilla común, el buitrón, el estornino negro, el alcaudón real y el abejaruco. Otro imperdible para quien gusta de observar aves es el Parque Nacional y Reserva de la Biosfera de Monfragüe, en la confluencia de los ríos Tajo y Tiétar. Con más de 18.000 hectáreas protegidas es, a través de sus muchos miradores y senderos perfectamente señalizados, uno de los mejores lugares para observar aves, sobre todo rapaces. Tal vez la especie más característica sea el buitre negro, con un máximo de 339 parejas; el águila imperial, que mantiene estabilizadas 12 parejas; el alimoche, con más de 30 parejas; o la cigüeña negra, con una cifra similar. La rapaz más visible es, sin duda, el buitre leonado, con 635 parejas seguras y casi 800 estimadas. Pero hay otros muchos lugares en Cáceres para observar aves: la Sierra de Gata y el Embalse de Borbollón para ver el vuelo del elanio azul todo el año; Las Hurdes con el búho chico, el azor o la aguililla calzada; el Valle del Ambroz donde campea el gavilán o el colirrojo tizón; Miajadas-Trujillo, dos áreas con gran valor ornitológico por acoger aves esteparias como la avutarda, el sisón o el alcaraván además de que los campos de arroz de Miajadas son un entorno estupendo para maravillarse con la invernada de las grullas; La Vera para disfrutar de la cigüeña negra y el alcotán; o la Sierra de San Pedro en plena Reserva de la Biosfera Tajo-Tejo Internacional, hogar del cárabo y santuario del águila imperial ibérica y del buitre negro. Observar aves de la mano de empresas especializadas. El 74,1% del territorio de Extremadura ha sido incluido dentro del inventario de Áreas Importantes para las Aves de España (SEO/BirdLife, 1995), tratándose de una situación excepcional tanto a nivel nacional como en el ámbito europeo. En este contexto, surge el Club de Producto de Turismo Ornitológico ‘Birding in Extremadura’, una agrupación que organiza y estructura toda la oferta de servicios turísticos relacionadas con la observación de aves en la comunidad autónoma e impulsar el birdwatching, velando, además, por la conservación de los recursos turísticos ornitológicos y naturales. Para ello, han creado una completa guía online con más de 25 rutas para los visitantes que busquen observar aves en los muchos rincones naturales de la provincia de Cáceres.