… una sucesión de torres para tender cables de alta tensión, las auto- pistas de la electricidad. Pero cualquier observador informado apre- ciará una infraestructura sofisticada, tan estratégica como la genera- ción y tan necesaria como el consumo. Un ejemplo: el boom de Data Centers para la gestión masiva de datos, incluida la IA. Según organiza- ciones como Spain DC, su despliegue depende de la potencia instala- da, pero sobre todo de contar con redes que garanticen la estabilidad de ese suministro masivo. Y este es solo un sector. Si añadimos todos los vinculados a la elec- trificación acelerada (industrias y minería, transporte y recarga, auto- consumo fotovoltaico, bombas de calor y geotermia, hidrógeno verde, enchufes y baterías para digitalizar y automatizar…), se multiplica el papel crítico de la transmisión y distribución. “Sin una red moderna, robusta y bien mallada desde los puntos de generación (cada vez más renovables y distribuidos) hasta los centros de consumo (cada vez más variados y de mayor volumen), la transi- ción energética no es viable”, apunta Jorge García Gutiérrez-Marcet, director global de Líneas de Transmisión y Proyectos Industriales Sostenibles, en el negocio de Concesiones de ACCIONA. Esa red hace posible una integración efectiva de las renovables y desarrollar todas las tecnologías energéticas emergentes, con el fin de garantizar ese suministro complejo, de alta capacidad y precios optimizados para los usuarios finales. Energía limpia PARA UN OBSERVADOR CASUAL, LAS NUEVAS LÍNEAS DE TRANSMISIÓN PARECEN LAS DE SIEMPRE…