José María Gil-Vernet, hijo REFERENCIAS: > [1] Organización Nacional de Trasplantes. Notas de prensa de balance de 2019 y 2020. http://www.ont.es/prensa/NotasDePrensa/Nota%20de%20Prensa%20BALANCE%20ONT.PDF http://www.ont.es/Documents/BALANCE%20DE%20ACTIV%20DONACI%C3%93N%20Y%20TRASPLANTE%202019_2.pdf > [2] José María Gil-Vernet Vila, página web oficial: www.videos-gilvernet.org Un catalán universal: reconocimientos La década de los 2000 fue la de galardones a su prolífica trayectoria. En el año 2002, la Asociación Española de Urología le concedió su máximo honor, la medalla Francis-co Díaz. En el 2009, la Société Internationale d’Urologie le otorgó el Distinguished Career Award, y en el 2016, la Asociación Europea de Urología (EAU) le premió con el EAU Innovators in Urology Award. Siempre, desde sus profundas raíces catalanas, se sintió orgulloso de ser español y puso los nombres de Cataluña y España en lo más alto de la urología internacional. El 3 de junio del 2008, además, ingresó como Académico de Número en la Real Academia Nacional de Medicina (RANM). Ocupó el sillón 14, que había pertenecido al profesor Luis Cifuentes Delatte, al que rindió homenaje en su discurso de inves-tidura. El protagonista de su alocución fue su padre, Salvador Gil Vernet, nombrado en 1977 Académico de Honor. Sus últimos años, hasta bien cumplidos los noventa, fueron un ir y venir en el AVE Madrid-Barcelona para participar, con la misma ilusión de un joven universitario, en las sesiones de la RANM. El hijo del urólogo Mi padre convivió con la medicina desde que nació: era hijo del reconocido urólogo Salvador Gil Vernet, catedrático de Anatomía y responsable del Servicio de Urología del Hospital Clínic de Barcelona. Durante sus primeros cursos en la Universidad de Barcelona, solía acompañarle a la sala de disección y le ayudaba en sus investigaciones sobre anatomía topográfica. Así, de manera natural, fue adquiriendo un conocimiento exhaustivo de la anatomía urogenital y una destreza especial en la disección que, más tarde, fueron decisivos en su proyección como cirujano. Sus primeros logros confirmaron ese aprendizaje privilegiado: en 1946 terminó la carrera y en 1951 obtuvo el título de Doctor en Medicina por la Universidad de Ma-drid, con la tesis “Estudio de la reimplantación de uréteres en el intestino”. En la década de los cincuenta, se convirtió en el primero en utilizar el intestino del-gado para reemplazar el uréter y el primero en efectuar una cistectomía radical, con sustitución de la vejiga por un reservorio formado por el colon sigmoide. Amistad profunda con otros destacados urólogos En el “I Simposio Internacional sobre Trasplantes de Órganos”, celebrado en el Hos-pital La Paz de Madrid en 1969, nació su relación fecunda con los urólogos José Antonio Martínez-Piñeiro y Remigio Vela-Navarrete, ambos muy comprometidos con el desarrollo de un programa de trasplante renal de ámbito nacional. También quiero recordar la amistad que mantuvo, más allá de lo estrictamente pro-fesional, con el doctor Enrique Pérez-Castro, pionero mundial de la endourología y con el que compartió inolvidables jornadas cinegéticas. Aprovechaba también sus breves estancias en Madrid para visitar a la familia de su primo Jaime Gil Martí, quien se había trasladado a la capital desde el pequeño pueblo de Vandellós (Tarragona) allá por los años 40. Compartían recuerdos de su infancia en el Baix Camp, mientras deambulaban por la plaza de Oriente y subían hasta los jardines de Sabatini. • Suyos son el primer trasplante de riñón en España (1965) y el primero de testículo del mundo (1978) En 1969 logró elinjerto renal con mayor supervivencia en la historia: el de Liberto Radua, con una función óptima durante 47 años LA CONSULTA > Dr. José María Gil-Vernet 13