nutrición ¿De qué están hechos? originales, al menos en un sentido organoléptico y gastronómico. En el aspecto nutricional suelen ser muy diferentes. Hoy existe una oferta cada vez más amplia, en la que se inclu-yen alimentos desarrollados a imagen y semejanza de embutidos, quesos, hamburguesas, albóndigas, pollo o pescado… Todos ellos tienen una cosa en común: están elaborados a base de vegetales. Ahora bien, entre estos productos podemos encontrar formula-ciones con distintos ingredientes, así que pueden llegar a ser muy diferentes entre sí. ¿Cómo imitan a los productos del mar? En el caso de los sucedáneos vegetales de pescado podemos en-contrar una amplia variedad de formulaciones, incluso aunque imiten al mismo alimento. Por ejemplo, uno que imite a las gam-bas puede tener como ingrediente principal goma de konjac (po-lisacárido que se obtiene de la raíz de la planta del mismo nom- La mayoría de productos que imitan al pescado están elaborados con almidones y gelificantes, ingredientes de escaso valor nutricional que nada tienen que ver con el original. Sigue leyendo ¿De qué están hechos? Como estos productos se elaboran a imagen y semejanza de pescados y productos del mar (salmón, atún, gambas, calamares, pulpo...), su formulación se hace a la carta, utilizando diferentes ingredientes que permitan imitar las características de los originales: • Textura. Para tratar de lograr una textura parecida a la de los alimentos que imitan, se utilizan ingredientes como espesantes y gelificantes, como almidón de patata, de maíz o de tapioca, goma de konjac, goma garrofín, proteína de legumbres o fibras vegetales. Estos ingredientes son capaces de retener agua, formando una estructura consistente, que es la que da cuerpo al producto. En algunos casos también se utiliza alguna materia grasa, como aceite de girasol, de colza o grasa de coco, que aporta consistencia y jugosidad. • Aroma y sabor. Para conseguir aromas y sabores parecidos a los del pescado se utilizan ingredientes como algas, levaduras, aromas de origen vegetal, especias y condimentos (jengibre, pimienta...). Normalmente se encuentran en pequeñas cantidades. • Aspecto. En el caso de los productos que imitan al pescado, la forma es fácil de conseguir porque generalmente se venden en forma de filetes o láminas. En otros productos, como los sucedáneos de gambas, se utilizan moldes para tratar de imitar su forma. En ambos casos, para conseguir que tengan colores y tonalidades similares a los originales, se emplean normalmente pigmentos vegetales, como betacaroteno, licopeno o concentrados de diferentes alimentos: remolacha, zanahoria... Por lo general, su cantidad es escasa. • Valor nutricional. En algunos productos podemos encontrar vitaminas o minerales, empleados para aportar un mayor valor nutricional.