Quid Rebelión en los ‘hubs’ productivos del sur “El señor Jones, de la Granja Solariega, había echado llave a los gallineros antes de irse a dormir, pero estaba tan borracho que se había olvidado de cerrar las trampillas”. George Orwell comenzada así su novela Rebelión en la granja, publicada en agosto de 1945, que rápidamente se convirtió en un libro de culto al retratar, de forma irónica y zoomorfa, el peligro de las derivas autoritarias del comunismo tras la Revolución Bolchevique. El orden mundial se redibuja, y los países del Sur Global, impulsados por un mayor crecimiento económico, reclaman un cambio de liderazgo y un sistema más multilateral. Por Celia Oliveras M ientras China, Estados Unidos y Europa están inmer- Público e investigadora sénior para Latinoamérica del Cidob. sos en una guerra comercial que no se había visto hace“El Sur Global está creciendo, y loestá hciedo panor encmai décadas, los países del sur global no han perdido de vista sus ob-de los ritmos que registran los países occidentales y del norte”, jetivos de expansión y consolidacióne sus economías. Aunqued continúa la experta. Países como Brasil,de hecho, han alcan- unMade in Brasil o Made in Méxicopuede no sonar tan atrac- zado crecimientos de hasta un 3% de sus economías en 2024, tivo como un Made in Italy, estos países han consolidado su a causa de la caída de la inflación global y un mercado de tra- papel como grandes productores en las últimas décadas. Lejos bajo cada vez más fuerte. de la imagen tradicional de países agricultores, las potencias la-Según los mismos datos del FMI, de hecho, la inflación de tinoamericanas sealzan como grandesexportadoresdeproduc- la región pasará de un 16,8% en 2024 a un 8,5% a cierre de este tos tan fundamentales como el petróleo (Venezuela), el cobre año. Para 2029, la entidad prevé que esta se haya reducido hasta (Chile) e incluso la moda (México o Colombia). Con más de un 3,6%. “Hemos visto un debilitamiento occidental, tanto en veinte millones de kilómetros cuadrados en total, y 650 millo-lo político como en lo económico, que ha llevado a estospaí- nes de habitantes (que actúan a partes iguales como mercado deses a reclamar un cambio en el liderazgo y plantear un sistema consumo y mano de obra), los países que conforman la unión multilateral”, explica Ayuso. De una forma similar a Asia en la de Latinoamérica y el Caribe llevan años creciendo. Los cons-década de los 80, la reógin lanoamericana ha ido creciendoti tantes conflictos políticos, enfrentamientos internos o desastresa la sombra, pero no lo ha hecho de forma regular. Si China (y naturales no parecen ser un impedimtopara su rimetino yen cec , ahoraIndia) se han alzado como los grandes ganadores del pocoa poco, estos estados reclaman un mayor peso en el orden crecimiento asiático, Brasil y México (y hasta hace unos meses, político y económico global. Argentina) lo hacen en el sur del nuevo continente. Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), la región ha cerrado 2024 con un crecimiento estimado de sus economías Brasil, productor interno del 2,1%, por encima del alza del 1,8% que ha experimentado el“Lejos de la tradicional imagen que se tiene de Brasil como un conjunto de las economías avanzadas. De cara a este año, ade-país agricultor, gran parte de sueconomía se sustenta gracias más, la entidadestima que los paísede Latinoamris éca acee-la su propia industria, que comercializa con países de la región”, rarán su crecimiento hasta el 2,5%, frente al estancamiento, oexplica la experta del Cidob. El sector primario sí que acumula incluso desaceleración, que registrarán las principales econo-gran parte del peso de las exportaciones brasileñas al exterior, mías mundiales. pero estas suponen apenas un 10% de la economía brasileña El orden político y económico mundial actual, con Estados en su conjunto. Unidos ala cabeza, ya no se corsondeconlasitaiórepucn ac- El principal motor económico del país es, de hecho, el sec- tual, explica Anna Ayuso, doctora en Derecho Internacional tor servicios, que representa el 70% del Producto Interior Bruto 100 Modaes — Nº 53 gnicruoS